lunes, 30 de julio de 2012

Recensiones

DOS LIBROS
  
Como es sabido, cada vez se publican menos libros buenos; la lectura edificante no abunda; lo que sobra es la basura intelectual. Esa es la razón (o, mejor dicho, la sinrazón), de la existencia de una “Feria del  Libro”, como la que se acaba de cerrar en Buenos Aires, donde, salvo contadas excepciones, lo más llamativo a exponer han sido los resentimientos viscosos de Eduardo Galeano, las “reflexiones” de Aníbal Fernández, o las confesiones procaces de Moria Casán.
  
Ante una desgracia de ese tamaño cabría simplemente lamentarse, como habitualmente tenemos que hacer a diario por los sucesos de nuestra patria.
  
Pero también podríamos intentar acá la aplicación de un principio moral que reza que siempre hay que tratar de sacar el bien posible de un mal inevitable: “Ahogar el mal en el bien”.
  
¿Cómo?
  
Pues, trasladando al campo editorial un hecho físico industrial. Es notorio que lo que se ofrece, en la citada Feria, en gran proporción, es desecho de la peor especie. Ahora bien: se sabe que ciertas maquinarias pueden compactar los desperdicios en general, hasta conseguir que de una sucia chatarra quede una chapa utilizable. Pues, algo análogo podríamos procurar hacer nosotros, seleccionando dentro de la multitud libresca, alguno que nos preste cierta utilidad, tras resumirlo.
  
Guiados por ese criterio, recorrimos los “stands” de la Feria, y dimos con tres libros. Traemos ahora al lector de “Cabildo” el extracto compactado de dos de ellos.
  
Del tercero, que es mucho peor, (“La cuestión Malvinas. Crítica del Nacionalismo argentino”, de Fernando A. Iglesias, Buenos Aires, Aguilar, 2012), nos ocuparemos en otro número.
  
No se trata, por cierto, de recorrer todos los temas allí considerados. No. Sólo bucearemos en esos mares tenebrosos en busca de las cuestiones referentes a las luchas armadas de la época del llamado “Proceso de Reorganización Nacional”, y sus eventuales prolongaciones a tiempos más cercanos.  Veámoslo.
  
“SUEÑOS POSTERGADOS”
  
Ese prócer de la era kirchneriana de la Argentina que es Sergio Schoklender, publicó en diciembre del 2011, un libro, o algo por el estilo, denominado “Sueños Postergados. Coimas y corrupción en la patria de los desvíos” (Bs. As., Planeta, 2011). En esta misma revista, autores más calificados que nosotros, se han ocupado de los conceptos vertidos por el Asesor de la Fundación Madres de Plaza de Mayo. No los vamos a reiterar. Pero ya que, con cierto atraso, lo acabamos de comprar y leer, queremos consignar algunas perlitas escondidas en dicha ostra editorial, que, tal vez, no hayan sido resaltadas antes.
  
Sin dar una fecha exacta, situando el caso alrededor del año 2003, el ilustre parricida y no menos célebre estafador, anota:
  
“El programa que sosteníamos con las Madres era totalmente revolucionario. Se había nutrido también de compañeros de los Hijos de las Madres.  Nuestro objetivo era la revolución. La única salida que se veía lógica era la lucha armada. No veíamos otra alternativa para enfrentar el menemismo y el neoliberalismo. En aquella época en el sótano de la universidad (nota: de la Fundación Madres de Plaza de Mayo) guardábamos de todo. Si me llamaban a medianoche, yo pensaba que había volado la universidad. Cuando se produjo el enamoramiento entre Hebe y Néstor (Kirchner) tuvimos que sacar urgente todo lo que había en el sótano y hacerlo desaparecer […]. De todos modos, tuvimos mucha relación con grupos que propugnaban concretamente la lucha armada y no escapamos a su influencia” (op. cit., págs. 85, 87).
  
Son párrafos que no requieren glosa alguna de nuestra parte. Se comentan solos. A lo mejor un fiscal verifica si los delitos de sedición, asociación ilícita, rebelión y otros atentados contra la autoridad, en concurso real, allí confesados, están prescriptos o no. A todo evento, Schoklender declara que para ese tiempo él era abogado de “Quebracho”, cuyo amor por la legalidad es bien conocido. Lo interesante es que, antes del poder y el dinero proveniente del “enamoramiento entre Hebe y Kirchner”, la egregia Fundación de Derechos Humanos (y, de paso, la organización “Hijos”) se dedicaban a acumular trinitrotolueno en el sótano de su “Universidad”. Otra mercadería bien cubierta por el afamado pañuelo blanco.
  
Schoklender también da buena cuenta de la excelente relación de las “Madres”, nuestro principal organismo defensor de los Derechos Humanos, y distintas entidades terroristas. Narra los vínculos de las Madres con la ETA, con la guerrilla zapatista, con el Ejército de Liberación Nacional colombiano, etc. De esas ligaduras nos parecen de mayor interés las establecidas con las FARC. De éstas dice el héroe “fundacional”:
  
“Recibíamos permanentemente la visita de los comandantes de las FARC […]. Los comandantes de las FARC solían decirnos que necesitaban que les enviáramos jóvenes con formación política […]. De los jóvenes que fueron por medio de nosotros, muy pocos volvieron. La inmensa mayoría permaneció allá […]. Hebe sentía una gran fascinación por las FARC porque, en cierta medida, sus integrantes representaban algunos de los ideales, del trabajo y de la historia militante de sus hijos” (op. cit., págs. 120, 121, 122).
  
Trata, después, de las relaciones de las Madres, en especial Hebe de Bonafini, con la Cuba castrista:
  
“Hebe también se convirtió en la emisaria de los Mensajes de Marcos (del EZLN) hacia Fidel […]. Ya había ocupado un rol similar cuando actuaba de emisaria de Fidel ante los Kirchner […]. A partir de entonces la relación de Hebe con Fidel se hizo muy fluida”.
  
Hebe pasó a ser un nexo más de lo que venimos sosteniendo desde hace años: la guerrilla y sus adláteres son simples mandaderos del Departamento América del Comité Central del Partido Comunista Cubano.
  
Por fin, en su miscelánea, el Caballero don Sergio narra cómo doña Hebe lo comisionó para robar, en beneficio de las Madres, y cómo acordó con Patricio Echegaray (secretario general del P.C.A.) que se convirtiera en su reemplazante, en caso que a él lo aprehendieran por “chorro” (pág. 155). Y cierra sus recuerdos con un dato que nadie debe olvidar: “Hebe era la gran mentirosa de unas mentiras necesarias. Por ejemplo, la cuestión de los treinta mil desaparecidos. Cuando la CONADEP dijo que había verificado nueve mil desapariciones, los organismos de derechos humanos dijeron que en realidad debía haber quince mil. Hebe salió a decir que eran treinta mil y a repetirlo una y otra vez hasta que, de tanto decirlo, así quedó. Un solo desaparecido es un tragedia, pero nunca fueron treinta mil, eso fue un invento de ella” (op. cit., pág. 185).
  
Mentira que después, por boca del Presidente Néstor Kirchner, quedó oficializada dogmáticamente. Un detalle más de lo bien que ha funcionado el marxoducto Fidel-Hebe-los Kirchner. ¡Felicitaciones!
“DISPOSICIÓN FINAL”

En varias ocasiones nos hemos referido al testimonio que nos diera el General Juan Antonio Buasso, acerca de la conversación mantenida por él con el entonces Comandante en Jefe del Ejército, General Jorge Rafael Videla. Lo recordamos ahora.
  
Buasso contaba que en marzo de 1976, estando él y el general Rodolfo Mujica prácticamente en disponibilidad, por su condición de nacionalistas frente al golpe liberal (situación corroborada por Rosendo Fraga, en “Ejército: del escarnio al poder (1973-1976)”, Buenos Aires, Sudamericana/Planeta, 1988), fueron citados, sucesivamente, por su superior. Como ellos ya estaban algo anoticiados de lo que se les iba a proponer, con su argumentación respectiva, acordaron entre sí, a fin de dar respuestas coincidentes.
  
El asunto que Videla comunicó a ambos generales, comenzando por el más antiguo, que era Rodolfo Mujica, su decisión de que se hicieran cargo de la Policía Federal Argentina. Aceptada la resolución por el subordinado, Videla los interrogó (siempre cada uno a su turno) acerca de si sabían cómo debían proceder en los casos más graves de los terroristas que fueran detenidos. Ambos militares nacionalistas respondieron que sí lo sabían; que para eso se había reformado el Código Penal, concordado con el Código de Justicia Militar. De otro modo, que se les instruiría juicio sumario castrense, y dictada la sentencia por el juez militar, en su caso, sentencia de muerte, se procedería a fusilar al convicto.
  
En ese estado de la cuestión fue cuando Videla les dijo que eso era un dislate. Que el Dr. Henry Kissinger le había comentado una situación ejemplar con opciones diversas. Por un lado el General Francisco Franco, en España, al querer ejecutar la pena de muerte contra unos etarras condenados por los Tribunales Militares, se había visto enfrentado con la opinión adversa de todo el mundo, incluida la del Papa Paulo VI. En cambio, Idi Amín Dadá, tirano de Uganda, “se pasaba a la cacerola cinco mil tipos cada noche” (según expresión textual), y nadie decía nada. Luego, para Videla era obvio que el segundo camino, el aconsejado por Kissinger a los militares iberoamericanos que debían contener el ataque castrista, era el correcto.
  
Los generales nacionalistas convocados respondieron (siempre en su turno) que Franco, maguer la oposición internacional, había fusilado a los etarras, documentando el hecho en expedientes. Que acá no habría necesidad de fusilar a demasiados terroristas, por la calidad ejemplarizadora del fusilamiento público (de la que carecían los métodos clandestinos). Máxime, si como ellos lo pedían, el Ejército mostraba a la población que el castigo iba a comenzar por sus propios miembros traidores. Y señalaron el caso del Coronel Perlinger, quien se hallaba detenido en Campo de Mayo por haber intervenido en la fuga de los guerrilleros del aeropuerto de Trelew. El otro sendero, el de las “desapariciones”, concluyeron, era indigno del Ejército; añadiendo Buasso: “Esto lo vamos a pagar muy caro y largamente, mi General”.
  
De resultas de lo cual, cada uno de los generales nacionalistas fue pasado a retiro. Aún resuenan en mis oídos las nobles palabras de don Ricardo Curuchet en el ágape de desagravio que los amigos le brindaron a don Rodolfo Mujica. Más largo eco ha tenido el debate sobre el alcance de las “desapariciones” que las Fuerzas Armadas practicaron para reprimir a los agresores castristas.
  
Videla hasta ahora había negado el hecho, había dado explicaciones ambiguas.
  
Empero, ante la requisitoria periodística de Ceferino Reato, en el libro “Disposición Final. La confesión de Videla sobre los desaparecidos” (Buenos Aires, Sudamericana, 2012), aunque sin mencionar las entrevistas que mentábamos, da una versión bastante coincidente con aquella que dieron en su momento nuestros generales amigos.
  
Así, ahora leemos estos párrafos en la obra de Reato:
  
“Videla se hace cargo de «todos esos hechos» y señala que los alentó de manera implícita, tácita.
“Frente a esas situaciones, había dos caminos para sancionar a los responsables (de las desapariciones) o alentar estas situaciones de manera tácita como una orden superior no escrita que creara la certeza en los mandos inferiores de que nadie sufriría ningún reproche. No había, no podía haber una Orden de Operaciones que lo dijera. Hubo una autorización tácita. Yo me hago cargo de todos esos hechos. Y agrega que, en el contexto de aquella época, fue «la mejor solución» que encontraron.
“No había otra solución: estábamos de acuerdo en que era el precio a pagar para ganar la guerra, y necesitábamos que no fuera evidente para que la sociedad no se diera cuenta. Había que eliminar un conjunto grande de personas que no podían ser llevadas a la justicia ni tampoco fusiladas. El dilema era cómo hacerlo para que a la sociedad le pasara desapercibido. La solución fue sutil - la desaparición de personas” (op. cit., págs. 56-57).
  
Más adelante, Videla aclara un poco el punto. Porque de lo transcrito podría inferirse que él se limitó a tolerar la conducta ilícita de sus subordinados, bien que compartiéndola tácitamente.
  
En realidad, la cosa fue al revés. Los altos mandos liberales (Viola, Harguindeguy, Massera, “Pajarito” Suárez Mason, Agosti, Villarreal, etc.) fueron los que ordenaron ese tipo de represión, que sus subordinados, por obediencia debida, acataron. Precisamente, en ese otro pasaje del citado libro, el asunto queda más en claro:
  
“Más allá de cuántos fueron los desaparecidos, Videla afirma que no podía fusilar a «las personas que debían morir para ganar la guerra» por varios motivos. Uno de ellos era que en 1975 el dictador de España, el generalísimo Francisco Franco, había respaldado la decisión de un consejo de guerra que dispuso la ejecución de tres miembros de la ETA, pero no pudo hacerlo por las protestas de gobiernos europeos y latinoamericanos y hasta del papa Paulo VI.“Pongamos que eran siete mil u ocho mil las personas que debían morir para ganar la guerra; no podíamos fusilarlas. ¿Cómo íbamos fusilar a toda esa gente?… porque iba a llegar un momento en que la gente diría: «¡Basta, esto no es Cuba!»” (op. cit., págs. 43-44).
  
“Se llegó a la decisión que esa gente desapareciera; cada desaparición puede ser entendida ciertamente como el enmascaramiento, el disimulo, de una muerte” (op. cit., pág. 51).
  
En suma, lo que confiesa Videla es un “crimen de guerra”; delito penal internacional. Homicidios calificados por premeditación. Asesinatos deliberados y ocultados. Aunque de pésima manera judicial, Videla y sus subordinados están pagando aquella negra decisión, tomada para su mal y el de la FF.AA. argentinas. Ante tantas “desapariciones”, la gente de haberlo sabido, les podría haber dicho: “¡Basta, esto no es Uganda!”  Este país africano era el modelo que Videla, en 1976, esgrimió ante los dos firmes generales nacionalistas.
  
Bien. Aunque el propósito de  un trío de lecturas no se concretó, al menos, de las dos leídas sacamos una breve y neta lección, a saber: que tan malas pueden ser las aberraciones liberales como las esclavitudes marxistas. Y que muchas veces, ambas ilicitudes se conectan entre sí y se retroalimentan. Una vez más: ¡tomemos debida nota de esta moraleja política y paradoja ideológica!
  
Enrique Díaz Araujo
  

13 comentarios:

Anónimo dijo...

Una coincidencia: poco tiempo después (uno o dos meses) de que Hebe de Bonafini insultara públicamente y en su propia provincia al gobernador de Tucumán: Alperovich, tratándolo de acomodaticio, entre otras cosas, es que estalla el escándalo Schocklender - Hebe. De repente su figura de "madre" pasó de bienamada a sospechosa.
Jimena

Anónimo dijo...

El uruguayo ex diseñador gráfico Eduardo Hughes alias Eduardo Galeano no escribió el libro que lo llevó a la fama ("Venas...")y tal vez fue escrito por un equipo y financiado por la social democracia alemana que mas tarde financió la campaña de la cinagoga radical. No obstante puso su firma y viene embolsando hace muchos años de "duro periplo" de conferencias por Europa unos cuantos dólares que le permiten una vida de regalo en su pais nativo. Como escritor tiene un 4 y como historiador es casi tan mentiroso como Pigna que ya es hablar de campeonato mnndial.Un petiso bucanero.
Al coronel Pealinger lo conocí en reuniones sociales en su departamento(piso) de la calle Olleros, donde tenía una profusa biblioteca. Hombre cordial y tranquilo sin embargo me impresionaba (hablo de los 70)como alguien a quien se le habían salido los caramelos del frasco. Mi contacto no se relacionó con la política, de la que el, al menos en esas circunstancias, no hablaba y yo tampoco.
Respecto de Jorge Rafael Videla no es esclarecedor decir ue fue liberal o no fue liberal. Hizo lo que tenía que hacer y eso, en un hombre ya es una proeza. Pensar en nacionalismo como evasión de la realidad internacional es lo que hizo Fidel Castro y hoy vemos lo que es La Habana. El mundo esta globalizado por lo menos desde el siglo 19 pero el periodismo (cuna de orates y tribuna de ignorantes e incultos)insiste en que es de ahora y que los judíos tienen dominada las finanzas y nos estan fornicando.Algo de eso SIEMPRE HUBO y si no nos gusta, la alternativa es Chavez o el criminal presidente de Irán que nos debe las muertes argentinas por culpa de la guerra con los judíos, así como toda Cuba nos debe por la sangre de argentinos asesinados por la guerrilla que ese negro barato de Castro hacía entrenar en la isla.No hay salida, la vida es dura y cruel y la alternativa del Imperio Norteamericano (bastante suave comparado con otros imperios)son otros imperios infinitamente peores.Hay que nadar en un mar de mierda y Videla hizo lo que pudo.Gracias General.
CD

Anónimo dijo...

error mi amigo C.D. 1) la globalizacion en pleno retroceso, sino ver lo que ocurre en la eurozona 2) Europa marcha inexorablemente a un sistema de fronteras cerradas como en 1916, pues van a aflorar los nacionalismos existencialistas. 3) EEUU, tirò abajo la trilateral comission que preveìa las 3 monedas y el continentalismo ( Dolar yen y euro ), se dieron cuenta que no podian ser el Banco central del Mundo, el yen quedo relegado detras de la moneda china la rupia y el rublo, el euro en franca particiòn y el dolar ahì. los subloques se parten en mil pedazos, y luego vienen por aqui. 4)EEUU necesita sopesar el poderio militar y estratègico de brasil que esta en el BRICH, o sea la fuerza militar mas poderosa despues de la NATO en Sud America, ese pais sera Argentina, necesiotarà esta vez un gobierno nacionalista pero con tendencia militarista para equiparar el auje de brasil. para eso le cerro el acceso al pacifico con la creracion de dicho bloque. bueno Videla, con perdon no un error de procedimiento no invalida el objetivo final. Delito de Lesa Humanidad???? no era ley vigente al momento del hecho, la retractividad de la ley penal no es aplicable en el ambito del derecho punitivo. bueno pero si confesò: Causa finità est. daniel jorge

Anónimo dijo...

Videla hizo, lo de Idi Amin, metio en la cacerola alas FFAA y el poder mundial se las comio, sasonadas muy bien por izquierda y por derecha.Gracias a él por empesar no enemos sistema de defensa, el trabajo posterior lo completó la zurda.
Pobre CD a las 19.58 ya estaba con exeso de fernet en sangre...Algunos tienen razón parece que el sionismo católico tambien existe, con discurso oficial importado del Deparamento de Estado y de la DAIA.

Anónimo dijo...

Solamente Johnny Walker etiqueta negra, aunque en epocas de default me he resignado al etiqueta roja. ¡¡ Fernet Jamás !!
Teniente General Jorge Rafael Videla, el que con hidalguía y valor tomo las riendas de la Patria en su momento mas dificil del siglo XX. ¡¡¡ Estás para el bronce Jorgito !!! Ya va a llegar...
CD

Anónimo dijo...

Por favor, que este personaje "CD" la termine con las loas a Videla.

Anónimo dijo...

CD.

¿Acaso has leído que en la revista o en la página web de CABILDO se reivindique a Videla y al Proceso?

La confusión suele pasar cuando NADA se sabe sobre el Nacionalismo católico y sobre el verdadero Federalismo.

LA SALETTE

Anónimo dijo...

E. Mario: Hay que hacerse cargo de las omisiones. el lugar que uno no ocupa siempre lo ocupa otro u otros. Si hubo generales nacionalistas catòlicos, segun se desprende de la nota por lo menos 2, sin contar al gral. acdel vilas y ramon camps, que si fueron reinvindicados por la revista en su momento, mas oficiales de otras fuerzas ( Aeronautica y Armada ). bueno antes que nada deben hacer un mea culpa por omision. el vikingo

Anónimo dijo...

Si vikingo con ese criterio tambien tendrian que haber habido nacionalistas en el gobierno de Macri, de Duhalde o como lo hubo (ejemplo que todos conocen) en el de Kirchner acordemonos tambien como terminó...una golondrina (o dos) no hacen verano

Anónimo dijo...

Vikingo.

No evadas mi pregunta. No me referí a los poquitos casos aislados de militares nacionalistas; me referí al liberal y masónico Proceso de Reorganización Nacional (nombre que se debe a la siniestra Organización Nacional que exterminó a los gauchos, caudillos, negros e indios) y al títere de su conductor, es decir: Videla.

Por tanto, te vuelvo a preguntar:

¿Acaso has leído que en la revista o en la página web de CABILDO se reivindique a Videla y al Proceso?

LA SALETTE

Anónimo dijo...

no evado su pregunta creo en su comentario que antecede y figura su pregunta esta destinado a C.D. ponerse de acuerdo por favvor. el vikingo

bernardocarlosblanco dijo...

Lo primero que quiero resaltar es el ESTOMAGO de DON ENRIQUE DÍAZ ARAUJO para leer los libros del PARRICIDA, REATO E IGLESIAS, gracias por haberlo hecho para informarnos. Sobre esto es de lo que venía hablando, LAMENTABLEMENTE DOS MÁS DOS ES CUATRO, aunque este de acuerdo con eso KISSINGER. Lo digo porque la lógica es IMPECABLE E IRREFUTABLE. Lo que no comparto es que se lo presente como una ORDEN DE KISSINGER AL GRAL. VIDELA, lo que el GRAL. VIDELA hizo fue aprovechar el visto bueno de un personaje PODEROSO, aunque había más poderosos que él, y hacer lo que de todos modos IBA Y DEBÍA HACER. Más poderoso que KISSINGER era su EMPLEADOR J. CARTER, que era un ZURDO INFRADOTADO que quería combatir al COMUNISMO CON DISCURSOS BONITOS Y DERECHOS HUMANOS, ASÍ LE FUE, MAL, hasta que llegó R. REAGAN y acabó con esa MENTIRA COMUNISTA. En CABILDO siempre se rescata al SOLDADO, y se combate la DEMOCRACIA porque es la ETERNA DISCUSIÓN que no lleva a nada, bueno, eso es lo que HIZO MI GRAL. VIDELA, ÉL ERA EL SUPERIOR, ÉL ERA EL RESPONSABLE, LO SIGUE SIENDO, LO ASUME Y LO ESTÁ PAGANDO. No creo que tuviera que DEBATIR LOS METODOS A USAR CONTRA EL ENEMIGO SUBVERSIVO CON SUS SUBORDINADOS. Continúa.

bernardocarlosblanco dijo...

En cuanto al método mejor para combatir a los TERRORISTAS ASESINOS, creo que sin NINGUNA DUDA fue el adoptado por el PROCESO MILITAR. Tan claro es que era inviable el tema de los FUSILAMIENTOS, que aún recordamos el de los ETARRAS después de 37 años, RECORDEMOS QUE EL GENERALISIMO TUVO QUE ESCUCHAR EL RECLAMO DE SU SANTIDAD EL PAPA, DE SU PROPIO HERMANO, ETC., y le perdonó la vida a 6 de los 11 condenados a muerte, ETA siguió matando hasta el día de hoy, algo parecido pasó con las FARC, en cambio en ARGENTINA con el método del GRAL. VIDELA SE TERMINÓ CON LA GUERRILLA DE INMEDIATO. Ya se los había juzgado y el TÍO CÁMPORA LOS LARGO A TODOS PARA QUE ASESINARAN A LOS JUECES QUE LOS HABÍAN CONDENADO, volver a juzgarlos era perder tiempo y no lograr nada. Si hubieran FUSILADO uno sólo, cosa que dudo, hoy todas las PLAZAS DE LA REPÚBLICA LLEVARÍAN SU NOMBRE, LO ÚNICO QUE NOS FALTABA, OTRO MÁRTIR DEL ZURDAJE. Pero voy a recordar otra ejecución que provocó conmoción MUNDIAL, HUELGAS,PEDIDOS DE CLEMENCIAS, ETC., la de SACCO Y VANZETTI en 1927, mártires del ANARQUISMO, ejecutados por una DEMOCRACIA LÍDER DEL MUNDO, seamos realistas, si un GOBIERNO MILITAR SUDAMERICANO pretendía hacer eso, era lo mismo que decir NO HAGAMOS NADA. Hay quienes dicen que TENDRÍAMOS QUE HABER HECHO COMO LOS ITALIANOS CON LAS BRIGADAS ROJAS, QUE USARON LOS JUECES Y LA CONSTITUCIÓN, nada mejor que escuchar lo que opinaba al respecto DON ATAHUALPA YUPANQUI en sus "CARTAS A NENETTE" desde PARÍS en el 78: "CADA DOS DÍAS SALEN FOTOS EN LA CÁRCEL DE LOS JEFES DE LAS BRIGADAS ROJAS, MUY SONRIENTES, BARBUDOS, CON CUIDADA BARBA Y MELENITA INTELECTUAL, LOS TIENEN COMO VEDETTES, Y ESO ES MUY MAL EJEMPLO EN ESTOS TIEMPOS EN EL QUE EL 60 % DE LAS FAMILIAS DEL MUNDO SE HA QUEDADO SIN LA TRADICIÓN DEL SILLÓN DEL ABUELO, LA PAZ DE LOS AÑOS, EL RESPETO A LA VIDA CUMPLIDA", esto lo decía un EDITORIALISTA DE CABILDO, LO DECÍA UN EX COMUNISTA, ESA ERA UNA ÉPOCA DE ORO DONDE HASTA LOS COMUNISTAS ERAN MEDIO FACHOS. Como decia GIULIANI, "TOLERANCIA CERO" con los SUBVERSIVOS TERRORISTAS ASESINOS MARXISTAS, GRACIAS MI GENERAL VIDELA POR ANIQUILAR MILITARMENTE A ESAS LACRAS. HOY MÁS QUE NUNCA, VIVA VIDELA.