sábado, 18 de septiembre de 2010

Poesía que promete

SALMO DESDE LA PRISIÓN
     
A NUESTROS PRESOS
POR LUCHAR POR PATRIA
     
La obra de los malvados es perecedera,
los ídolos de plata que ellos mismos elevaron
se derrumbarán un día sobre su base de arena,
y la noche caerá sobre sus soñadas tumbas.
  
Oh, Señor, Tú sabes que, tumbados sobre la paja
nosotros, a quienes han aherrojado detrás de esos cerrojos,
nosotros, para quienes los soldados de estas fuertes murallas
hacen sonar, en los corredores, sus botas claveteadas.
  
Oh, Señor, Tú sabes que, tumbados sobre la paja
o sobre el duro cemento de las prisiones sin tragaluz,
hemos sabido guardar en nosotros, costara lo que costara,
la esperanza, sin desfallecer, en días más hermosos.
   
Hemos hecho acopio de las viejas ternuras,
hemos dibujado sobre el yeso de las paredes
los mágicos retratos de nuestra santa juventud
y nuestros corazones sin remordimientos saben que aún son puros.
   
La necedad, fuera, se baña en la sangre roja,
y el enemigo, ya, se cree inmortal,
pero sólo él cree, aún, en su largo reinado
y nuestros barrotes, Señor, no tapan el cielo.
       
Roberto Brasillach
(Tomado de “Poemas de Fresnes”)
          

1 comentario:

Fernando José dijo...

Muy oportuno es el recuerdo de esta bella poesía de Roberto Brasillach, prisionero y asesinado por el Nuevo Orden Mundial.

En esa oportunidad la mano ejecutora fue la del masón títere de la banca Rothschild, Charles de Gaulle.

Consulto periódicamente la "Historia de la Guerra de España" de Robert Brasillach y disfruto con la frescura de su prosa y el verismo de sus asertos, esa sola obra ya le ganó el rencor implacable del inframundo de la gentuza mundial.

En nuestra Patria hay centenares de prisioneros de guerra, ochenta de ellos han fallecido producto de las penosas condiciones, que también han sufrido ese destino por imposición del Nuevo Orden Mundial. Porque fue este gobierno oculto del mundo que a través de sus títeres y de sus fundaciones, thinks tanks y ONG's ha impulsado la destrucción de las Fuerzas Armadas Argentinas y la persecución de sus integrantes.

El que crea que los impulsores de estos 27 años de ingnominia responden a odios locales, se equivoca totalmente.