sábado, 29 de marzo de 2008

En la semana del 2 de Abril (I)

IN MEMORIAM

Ya no están con nosotros. Dios les pidió el servicio de la muerte. Algunos lo cumplieron en la tierra… —el brazo cayó del cuerpo sin que el arma se cayera de los brazos—.

Otros vieron en las aguas el rojo azul de la sangre, hasta que ya nada vieron, porque estaban ante una Mirada Alta.

Y otros cruzaron los aires sin regreso, pero en las bases saben que hay estrellas convertidas en hangares.

Agua, tierra y aire nuestro.

Más nuestros por estos héroes, más soberanos desde el supremo señorío del sacrificio, más argentinos con este sello indeleble del martirio.

Hoy las tumbas son mojones que nos marcan el Camino. El mar formó nuevas huellas para que pasen un día proas celestes y blancas. Y el aire guarda las sombras caídas que van a alzarse una noche, cuando las alas criollas anuncien la Reconquista.

No han muerto en vano los muertos.

No hay silencio que nos haga olvidar de sus palabras; ni bullicio que venga a compensarnos sus silencios.

No habrá olvido que nos borre su memoria, y la memoria nos hará leales.

No habrá negocio, mediación, pacto o alianza que pueda quebrar los lazos que sellaron con sus vidas.

Ya no están con nosotros, y sin embargo son la gran presencia. Frente a la ausencia del poder y la entereza; frente al vacío de la inteligencia, frente al hueco en los testimonios varoniles, frente a la nada de quienes mercan con la Nación… ellos son la presencia. Indicadora, normativa, ejemplar.

Sólo ante Dios se han rendido.

Y estamos seguros que Él —Señor de los Ejércitos— conservará en las manos sus espadas para devolvérnoslas —intactas, pulidas, flamígeras— el tiempo en que disponga La Victoria.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Debemos recordar con profundo orgullo patriótico a nuestros hermanos cristianos caídos en defensa nuestra tierra; sin importar lo que digan los viles apátridas y ateos de estos tiempos.