viernes, 16 de agosto de 2013

Signo de los tiempos

ATREVIMIENTO INAUDITO
    
   
La reminiscencia a 1980 años del beso traidor  resulta escalofriante y significativa. En la fotografía aparece un escandaloso animador de la televisión local besando al Vicario del Señor, obviamente sorprendido como se percibe en la actitud pasiva.
   

Esta vez no concurrieron hordas que obstruyeran a seguidores y discípulos; de modo que resulta más inexplicable la carencia de custodios y asesores obligados a impedir el atrevimiento del divo corruptor. Un activo procurante de acercamientos lascivos, en especial de niñas y jóvenes a través de bailes procaces, piruetas ingeniosas o insinuaciones descaradas. Aquella actividad de los proveedores lupanarios identificados desde ya por el léxico con precisos calificativos infamantes.
   
Casimiro Conasco
Agosto de 2013
  

1 comentario:

Anónimo dijo...

Estimado Conasco:

Está bien que hace frío y necesitamos calentarnos un poco. Le cuento que con la noteja que perpetró nos ha hecho calentar a buena parte de los lectores de "Cabildo".

Haga honor a su apellido y ponga un poco mas de asco. Es muy ingenua su presentación de Bergoglio, alias "Francisco", como sorprendido por el beso del pornógrafo. Extienda su asco. Bergoglio sigue siendo Bergoglio y no es inocente de nada.

¿No pensó que a Bergoglio no le sorprende nada? Mas arriba le recomiendan que lea la brillante obra del Dr. Antonio Caponnetto "La Iglesia Traicionada". A mi también me parece que no la leyó y si la leyó no la entendió ¡Dele al libro, que le va a hacer bien!

Todas las idolatrías son nefastas, y muy especialmente la papolatría.

Fernando José Ares