sábado, 29 de julio de 2017

De pluma ajena



TRAS LOS PASOS
DE ENRIQUE STEL

Esta vez, el Diario de Malvinas… no lo escribe Enrique Stel. Esta vez, lo vamos a escribir nosotros, aquellos que lo admiramos y los mismos que le reconocemos su sacrificio por este país ya sea tanto en la Guerra del Atlántico Sur como en su actual condición de Preso Político Argentino.



Absolutamente ninguna de las personas consultadas se negó a formar parte de este documental llamado “Tras los pasos de Enrique Stel”. Al contrario; hubo que, por esta vez, seleccionar dolorosamente el testimonio y el material a consignar.



Nadie se quiso quedar afuera.



Por ejemplo, el periodista y corresponsal de Guerra Nicolás Kazansew. Cuando lo contacté para decirle que, en función de este trabajo, iba a realizar un viaje a Buenos Aires… resultó ser que precisamente los días en cuestión él se iba a encontrar en el interior. Era, pues, imposible coordinar…



Pero Nicolás estuvo en Malvinas y, por lo tanto, no es persona de achicarse en el combate. Pasada una semana (sin que yo le dijera nada), me escribió para decirme que quería formar parte de este trabajo y que, incluso, estaba dispuesto a viajar a Rosario el día que yo le dijera. ¿Quién quisiera perderse la participación de un soldado así? Finalmente convenimos que su parte sería a través de Skype.



Otro al que no le tiembla el pulso al momento de llamar a las cosas por su nombre es el escritor e historiador Sebastián Miranda. No sólo que aceptó de inmediato el reto sino que su participación en el documental verdaderamente ha terminado por significar la columna vertebral del mismo. Su extraordinario aporte es de un valor incalculable ya que nos brinda todo un material contextual sobre el que transcurre la obra. “La Guerra no ha terminado”, dijo, y él, pues, se sabe un combatiente en esta historia.



Por su parte, no menos valiosa es la participación del General (R) Mauricio Fernández Funes, camarada de Enrique Stel durante la contienda. Franqueza y abnegación son las palabras que mejor definen a este Veterano de Guerra, acaso la franqueza y abnegación que tanto escasea en incontables generales que han dado vuelta la espalda a sus camaradas víctimas de la persecución de la “in-Justicia” argentina, por la que ya se contabilizan más de dos mil detenciones arbitrarias y más de 400 muertes en cautiverio.



Se apeló, también, a fragmentos de una entrevista anterior que www.DAVIDREY.com.ar supo realizar a Carina Faur, esposa de Enrique Stel. El desesperado testimonio de Carina (“¿Qué más daño nos pueden hacer del que ya nos han hecho?”) no sólo que resulta ilustrativo de lo dramático de la situación por la que pasan miles de familias argentinas, sino que su solvencia en la temática que le aboca nos ahorró de precisar de fuentes letradas. Una esposa de lujo; una mujer de acero.



Por último, contamos con el invalorable aporte de Mabel Rouland, la señora madre de Enrique Stel, quien me recibió en su casa de Buenos Aires con la misma calidez con que lo haría mi propia abuela. La madre de un guerrero argentino no iba a ser ninguna “quedada”. Mabel empaña todo el trabajo de ternura, emoción y de gracia. Hace más de tres años que no puede estar con su hijo, pero se refiere a él como si terminara de abrazarlo.



Vaya mi agradecimiento en particular a mi propia esposa, quien me acompañó y auxilió (y soportó) en todo momento tanto en Buenos Aires como en Rosario, durante la edición del trabajo audiovisual.



En fin, como digo… muchas cosas quedaron afuera de este documental, por más doloroso que resulte. Pero esto no es sinónimo de otra cosa sino de una SEGUNDA PARTE tan necesaria como imperiosa.



Es que Enrique Stel, Veterano de la Guerra de Malvinas y Preso Político Argentino, es lucha, es esclarecimiento y es realidad, como lo son los artículos que él mismo escribe y que www.DAVIDREY.com.ar tiene el honor de publicar todas las semanas.



Por lo tanto, de más está decir que me siento profundamente honrado de haber realizado “Tras los pasos de Enrique Stel”. Me honra la temática abordada, me honran las personas entrevistadas y me honran sus respectivos testimonios.



Hoy, al “Diario de Malvinas” lo hemos escrito nosotros: aquellos que no hemos sido embaucados por el relato y los mismos que no estamos dispuestos a aceptar jamás que la injusticia se ensañe con aquellas personas que dieron todo por nosotros, por nuestro país y por nuestro futuro.



El documental “Tras los pasos de Enrique Stel”, por cierto, también encierra una sorpresa… ¡genial sorpresa! Pero, para saber de qué se trata, tendrá el interesado que sentarse un rato… a respirar algo de PATRIA.

David Rey


   

1 comentario:

Anónimo dijo...

Malvinas ES UNA GESTA y por lo tanto terminara con nuestra Victoria, pero creo que empezó porque los militares fueron tentados por USA entongada con Inglaterra para reventarnos y crear una base militar. Eso creo. Por otra parte, librar una guerra contra la OTAN y USA era un acto demencial, y habría que haber hecho fusilar a los responsables, pero para eso tenían que ser machos y no fue asi. Si yo hubiese tenido un hijo de 20 años haciendo la colimba creo que hubiese intentado matar a algunos de los responsables, tal vez a Galtieri que era mi vecino.y NO SE ME HUBIESE MOVIDO UN PELO
PACO LALANDA